lo reconozco. hoy estabas de nuevo aquí. en mi cama. como aquella vez. me acuerdo que me levanté para cambiar la hora del reloj. mierda, las siete. pero las agujas avanzaban hacia el sentido contrario. la película empezaba por sudar juntos en la cama y acababa yo sola entre sábanas frías y lágrimas en los ojos. sí, las agujas avanzaban hacia atrás. el tiempo no se paraba, pero dejaba de tener prisa. y si lo recuerdas, más allá del paraíso que imaginamos juntos, los minutos corrían parándose en la misma estación. tú y ella...ella y tú. ya no era mi cama, ni la tuya. y te aseguro que no era nuestro amor el que paró en la cama de ella. pero no podía pararlo, se me escapó de las manos. tiempo, ... tiempo. el que pasa, el que regresa, el que recuerda. y el que sigue avanzando hacia el principio.
lo reconozco. hoy estabas de nuevo aquí. en mi reloj. como aquella vez. me acuerdo que me levanté para romper el mes en el que me besaste, el día en el que me dijiste un tequiero, la hora en la que la besaste, y todos los segundos en los que lo recuerdo.
.k.
"las cuerdas del reloj retroceden.

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