.consentido y sinrazón.

me puede, me derriba, pero no mata. me da fuerzas para seguir, me da retroceso cuando no lo quiero, me impide cuestionarme lo que es, y se marcha cada vez que lo veo. no lo recuerdo, es extraño, es hondo pero poco profundo, y su presencia es innata. ya no está, se fue con lo que deseaba, el orgullo que crece, las palabras que vuelan, las canciones extrañas. las cartas a todos y a nadie, los papeles fuera de lugar, las uñas de colores, y las faldas que no paran de temblar. las intenciones que sacan de quicio y la cara de pocos amigos. y sus palmas de las manos marcan el ritmo de la música que no descansaba en su cama, la que dedicó a más de una necia, a mas de cinco sordas, y algún que otro inocente. pero tan solo es un ciego que se guía por los impulsos de su puto bastón roto en espinas, las que le pellizcan y le hacen reír o llorar, depende de la luz del sol, depende del tiempo de la hora y del día. y no se da cuenta de que no puede. no derriba. pero sí mata.



.k.