.si te ayudo a no seguir, ayúdame a que no lo haga.

puedo decírtelo, pero prefiero que sea sin tu permiso. vale, primero ábreme la puerta, después haz que te alegras de verme, y por último cógeme las flores que he conseguido arrancar del jardín donde nos besamos por primera vez. si consigo que me abras la puerta ya tendré la mitad de lo que quiero, que es verte. la otra mitad es llevarte conmigo, pero ambos sabemos que esa mitad es imposible. las dos mitades que pido son las dos mitades que componen mi persona: cabeza y corazón. si te veo, mi cabeza no sabe responder. y si no te puedo llevar conmigo, tengo que pedirte perdón, mi corazón te secuestró sin tu permiso hace más de veintiún años. y creo que puedo decírtelo, pero prefiero que sea así. ahora que he conseguido que me abras la puerta, déjame lanzarte sobre la cama y comenzar a caminarte lentamente hasta que no pueda más. y si no me dejas, voy a seguir amándote hasta que me duela. y si te hago el amor, que sea de verdad. porque nadie te hará el amor con tanto amor. porque mi amor por ti es tan grande como imposible. te quiero. y no necesito tu permiso para hacerlo, lo siento. después de 7 horas de viaje con mi pie temblando en el pedal, estoy cansada. pero más cansada estoy de estar cada día con esta derrota encima, y caminando conmigo como si no pasara nada. pero no importa, vas a seguir siendo mi felicidad encontrada y mi esperanza perdida. no importa, porque mi vida tiene una razón y mi muerte una lucha sin guerra. no importa, porque aunque sea la más despistada y zopenca, nunca me olvidaré que un día comencé a quererte.
no importa, porque estaré orgullosa de esta derrota, si gracias a mi renuncia algun dia consigues ser feliz.

.k.